Proveniente de Berlín (¿¿¿casualidad o tongo puro y duro???) me llega esta nueva postal enviada por mi amiga Merce para participar en el Concurso Internacional de Postales Feas.
Se trata de la reproducción de una pintura persa de 1846 que se encuentra en el Museo de Arte Islámico. Sin entrar a valorar la belleza o fealdad de la modelo, algo subjetivo e intrascendente, a nadie se le escapará que le vendría bien depilarse un poquito las cejas... De hecho, opino que es una pena que la moda actual no recoja esta modalidad porque estoy convencida de que yo misma lograría convertirme en un icono de belleza oriental en el plazo de dos semanas…
En fin, otra muestra más de que el mal gusto es un fenómeno mundial y extendido, independientemente de credo, raza o religión...
Se trata de la reproducción de una pintura persa de 1846 que se encuentra en el Museo de Arte Islámico. Sin entrar a valorar la belleza o fealdad de la modelo, algo subjetivo e intrascendente, a nadie se le escapará que le vendría bien depilarse un poquito las cejas... De hecho, opino que es una pena que la moda actual no recoja esta modalidad porque estoy convencida de que yo misma lograría convertirme en un icono de belleza oriental en el plazo de dos semanas…
En fin, otra muestra más de que el mal gusto es un fenómeno mundial y extendido, independientemente de credo, raza o religión...
humor
1 comentario:
Hola, debo confesar que este tipo de cosas me encantan. Las manifestaciones del mal gusto me resultan más interesantes que cualquier otra cosa... me parece que el gesto de la chica de la pintura es bastante curioso, ¿será la cara de satisfacción que pone cuando se toca el seno?... jejeje
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